“De las Lomas a Tepito, de Sonora a Yucatán, de Argentina a Japón han saboreado sus bocados pasteleros”. Se leía en un artículo del periódico Excelsior el domingo 21 de enero de 1979.
Se referían a los postres de la Señorita Aurora Valle Lombide quien en 1954 fundó la pastelería “La Selecta” aquí en México.
Nació en la provincia vasca de Vergara, donde aprendió el arte de la repostería, hija del Señor Francisco Valle de Gorbea y la Señora Estefanía Valle de Lombide.
Su padre aquí en México fue gerente de Suárez Orozco y Compañia y uno de los fundadores del Club España, así que una vez instalada su familia aquí el Sr. Francisco llevó los finos pasteles de su hija a reconocidos restaurantes donde quedaron tan complacidos que desde entonces era ella quien los surtía.
En esa época el afán de comercialización hizó que el arte de la repostería disminuyera con las panificadoras donde de producía con máquinas, sin embargo Aurorita “La Vasquita” como la llamaban cariñosamente sus seguidores mantuvo la elaboración de sus exquisitos pasteles deacuerdo a los cánones de este arte y las exigencias de la buena cocina, desde entonces no se usaba harina de trigo sino harina de almendras y se preparaban a mano pieza por pieza.
El pastel que se lleva la palma dentro del arte de la respostería de la Señorita Aurora Valle, es un gigantesco pastel de Navidad en forma de cocodrilo de siete metros de largo, dos y medio de ancho y más de cuatrocientos kilos. Hecho de mazapán de almendras, de almirados higos, duraznos, cerezas y de una gruesa corteza de yema imperial.
Dos y medio meses tardaba su elaboración y al mismo tiempo se elaboraban centenares de cocodrilitosque tan pronto aparecían volaban pues se enviaban a diferentes partes del mundo, desde Japón hasta Argentina.